Sinopsis
Desde la República de Platón, el ser humano occidental ha sentido la tentación de distanciarse de la conflictiva realidad y dar rienda suelta a su imaginación para construir utopías y ubicarlas en islas, ciudades, repúblicas o planetas lejanos. Suelen ser réplicas de su momento histórico proyectadas en el futuro con intención crítica, satírica y aun consoladora, ya que muestran que es posible la existencia de otra sociedad sin las carencias organizativas ni las lacras sociales de la presente. En no pocos casos incluyen antiutopías o distopías, constituyendo verdaderos antiejemplos de una civilización cuya evolución hacia unos derroteros en apariencia felices está condenada irremisiblemente a la catástrofe.Los utopistas españoles han sido menos dados a especular sobre este tipo de urbanizaciones ideales que a llevarlas a la práctica en esforzadas conquistas caballerescas o en obsesivas búsquedas de Dorados. Sin embargo, también hubo escritores que dejaron constanci